Primer debate
La democracia tiene muchas bondades y del mismo modo también tiene muchas áreas de oportunidad. La confluencia de ideas siempre es un ejercicio que permite el análisis y también la redefinición de criterio.
En un país como México resulta de manera natural que existan distintas propuestas y distintos tipos de planteamientos. El debate presidencial del día domingo es un excelente referente de como el ejercicio dialéctico nos permite ver, observar y analizar a los candidatos a la presidencia de la república.
El debate desde tiempos antiguos ha sido una confrontación que engrandece al intelecto, es un ejercicio en el que la oratoria y la retórica se hacen presentes, en donde cualquier argumento mal plasmado se puede convertir en un soliloquio o en un silogismo, la postura de las manos refleja seguridad o inseguridad, el color de la ropa y la ilación de las ideas resulta mucho más prometedor que cualquier encuesta que se refleje en este proceso
electoral.
La verdad tarde o temprano nos alcanza a todos
Recuerdo con gratitud el debate entre Demóstenes y Aristófanes, dicho debate viene referido en un libro biográfico de Demóstenes, hago alusión a este segmento del libro porque en el punto más álgido del debate, Demóstenes con la gran elocuencia que le caracterizaba le dijo a Aristófanes que por ningún motivo los argumentos deben ser ajenos la realidad que vive la sociedad y que tarde o temprano la verdad nos alcanza a todos.
Bajo este preámbulo el debate de ayer fue un excelente precedente de que la democracia en México está en un nuevo contexto, se logró presenciar un debate fluido y bajo un nuevo formato. Considero que la gran mayoría de los mexicanos estuvo al pendiente de lo que sucedió. Sin duda alguna existía mucha expectativa sobre el papel a desempeñar de cada uno de los candidatos.
El Bronco tuvo una participación muy peculiar, muy a su estilo utilizaba un lenguaje muy coloquial y tenía una ilación simpática, creo que conecto con la gente, del mismo modo enfrentaba a los demás candidatos con la bandera de ser un candidato independiente. Su área de oportunidad y creo que lo que la gente más recordara es cuando hizo mención de que a los ladrones deben cortarles la mano.
A Margarita Zavala la percibí muy desarticulada y del mismo modo sin mayores propuestas, se le veía incomoda, en dos o tres participaciónes fue muy efusiva y creo que le ayudo a salvar su participación en el debate, sin embargo el peso de Felipe le genero una sombra y la cuestión propia de no ser ecuánime se reflejara en su retroceso porcentual en esta semana.
Meade creo que fue simplemente gris, por mucha preparación y experiencia que ostente, no logro consolidar ninguna postura que le diera ventaja en el debate, del mismo modo considero que la marca PRI, le pesa mucho. Sin duda alguna fue un error no contestarle a Anaya la pregunta sobre la honestidad de Enrique Peña Nieto. La situación del PRI es la más complicada en este momento de la campaña, si el PRI no logra subir 5 puntos esta semana, creo que los liderazgos mercenarios comenzaran a abandonar ese barco.
Ricardo Anaya fue concreto y directo, bien articulado, arremetió a los demás candidatos con sus mismas palabras, tuvo un excelente manejo del tiempo, es decir siempre administraba su tiempo para que tuviera la posibilidad de replicar. Fue el único que verdaderamente llevo material visual el cual le daba el complemento ideal para poder argumentar y reforzar sus ideas. Tuvo una actitud calculada y bien expresada, las encuestas a dos días del debate reflejan en los medios nacionales claramente la victoria de Ricardo Anaya. Parece que Ricardo Anaya llevaba toda su vida preparándose para ese momento.
Andrés Manuel dejo mucho que desear, verdaderamente los pasados meses se le había visto sobrio y ecuánime, en las últimas semanas se le ha visto muy fuera de contexto, con demasiadas ambivalencias, se le noto incomodo desde el principio del debate, en ningún momento contesto nada. Su salida del escenario refleja mucho del o que este primer debate le represento, simplemente quería salirse de ese lugar lo antes posible.
El debate fue visto por más de 11 millones de personas, de manera clara y directa tendrá consecuencias positivas o negativas para cada candidato.
En México muchas veces la gente se ostenta como apolítica, sin embargo bajo los preceptos de Aristóteles y Sócrates, todos los seres humanos somos políticos.
Posiblemente el termino se confunda con que sean apartidistas, esto no significa que como sociedad podamos ser ajenos a todo lo que sucede en torno a una elección que definirá el rumbo del país.
Las elecciones, las guerras y los momentos de adversidad independientemente de la trinchera que se represente, sirve para ver quiénes son leales, quienes tienen valentía, quienes solo critican al sistema, sirve también para conocer las capacidades y las sinergias, también para enarbolar los tiempos de la fraternidad, no se puede ostentar la paz, cuando el futuro de una nación está en el punto más álgido de la batalla. Los futuros se construyen con las definiciones.
“Cuando la esperanza se vuelve invencible, la victoria final está asegurada”
IN SELENTIO MEI VERBA